sábado, 22 de agosto de 2020

Isabel Díaz-Ayuso en el punto de mira

 

Que la Comunidad de Madrid es la plaza más codiciada del gobierno de izquierda radical, PSOE y U.P., es algo que ya nadie duda; incluso la pareja Sánchez/Iglesias no ha titubeado en hacer pública su estrategia y el procedimiento a utilizar.

Isabel Díaz-Ayuso es la pieza a cobrarse. Ni el propio P.P. es ajeno a este ataque contra la Presidenta de la Comunidad de Madrid; ni el engañoso Ignacio Aguado con la inquietante Inés Arrimadas de media naranja política.

Y en esta coyuntura estamos en la tercera semana de este agosto y la “máquina” empieza a funcionar. Los métodos autoritarios y despóticos de Sánchez y sus bienmandados miran con razonable optimismo la rápida destrucción de la Presidenta (y empleo la palabra “razonable” porque, hasta el momento, siempre que la izquierda radical ha puesto el punto de mira en alguien, ese “alguien” ha caído; la euforia con que los Adriana Lastra y Pablo Echenique han celebrado la caída a los infiernos de Cayetana Álvarez de Toledo es el último ejemplo).

La máquina, maquinaria, esta vez no disimula:

El 17 de agosto, el delegado de gobierno en Madrid, el socialista José Manuel Franco, mira para otro lado ante la concentración a la que acudieron unas 3.000 personas en la todavía llamada apellidada plaza de Colón en Madrid contra el uso de mascarillas. Al grito de “bote, bote, bote, aquí no hay rebrote” la delegación de gobierno no impidió ni sancionó a ninguno de los asistentes. Esa misma noche, el director del Ruber Internacional de Madrid notificó que un varón de 40 años, asistente a la manifestación, ingresaba muy grave en la UCI del citado hospital.

El 19 de agosto, los sindicatos de profesores convocan una huelga SÓLO en Madrid para boicotear el inicio del curso escolar.

El 21 de agosto un juez anula las medidas de la Comunidad de Madrid contra el tabaco y el horario de los bares. El Juez entiende que la Comunidad no tiene “plena facultad” para tomarse estas iniciativas puesto que “limitan los derechos fundamentales”.

Todo esto con el aliño de la pasividad del gobierno central en atender a los avisos que el Gobierno de Comunidad de Madrid lleva haciendo hace meses sobre las prácticamente nulas medidas anti covid19 existentes en el todavía denominado aeropuerto Barajas Adolfo Suárez convirtiéndose en la actualidad en el aeropuerto más peligroso de Europa. 

Al tiempo una tienda de Madrid saca a precio de saldo una camiseta con el lema “Isabel Díaz-Ayuso cara coño”…

Dudar de que todos estos hechos son casuales es desconocer la filosofía y metodología de las  actuaciones de la pareja Pedro/Pablo: Isabel Díaz-Ayuso es el blanco de la cólera de la izquierda radical; y ante esa pieza a cobrarse vale todo.

Si ya han sido capaces de esconder muertos, animar a salir a la calle a la gente en plena pandemia, montar videos de promoción bochornosos, echar al Rey Emérito, mantenerse en el poder con el vicepresidente Iglesias investigado judicialmente en varios frentes, y un largo etc que ya aburre, sería de una ingenuidad insuperable creer que no “interesa” una Comunidad de Madrid con más muertos por covid19, unos colegios cerrados y un ocio desmadrado ofreciendo focos de contagios. Del resto ya se encargará LA SEXTA.

Con todo, me asalta y me intriga una duda: ¿cuál será la reacción de la cúpula del P.P.?

Vivimos una política en donde todo se negocia y se intercambia en un “te doy, me das”; y esa terminología tan útil y antiestética es aplicable en estos políticos de tres al cuarto que nos gobiernan.

Espero un P.P. férreo y tajante en la defensa de Isabel Díaz-Ayuso. Un P.P. inflexible en su abrigo a la Presidenta de la Comunidad de Madrid.

De momento, y desde la seguridad de ser un votante de la derecha española, empiezo a echar en falta una rueda de prensa con un único tema central en donde quede clara la garantía de apoyo y respaldo incondicional a Isabel Díaz Ayuso. Me vale con la misma energía mostrada en la presentación de Cuca Gamarra como nueva portavoz en el Congreso de los Diputados.

Conviene que tengamos claro que la afirmación de Pablo Iglesias “el miedo tiene que cambiar de bando” no afecta al P.P…. no vaya a ser que algún iluminado tenga la ocurrencia, muy al uso en esta “nueva normalidad política” carente de fidelidad y lealtad, de considerar a Isabel Díaz-Ayuso como amortizada.


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