El presidente Pedro Augustus Sánchez recibe una sonora pitada en Matalascañas… y agradece por twitter “la cariñosa acogida a mi persona”.
El vicepresidente Iglesias y su actual pareja salen huyendo de Felgueras (localidad de 102 habitantes) preocupados por una pintada aparecida en la carretera y, supongo, también furibundos por la nula capacidad de protección que deben de tener sus 15 policías.
La ministra de “educación” Celaá convoca una reunión para el 27 y 28 de agosto con el objeto de preparar el comienzo del curso escolar previsto para la segunda semana de septiembre (en los países europeos se cerraron todos los protocolos relacionados con los colegios la última semana de mayo con la idea de darles margen para organizarse de la mejor manera posible)
150.000 trabajadores siguen sin cobrar la prestación del ERTE por fuerza mayor.
Moncloa anunció a bombo y platillo el IMV (ingreso mínimo vital) que se suponía iba a beneficiar a 850.000 hogares, aproximadamente 2,3 millones de personas. 3 meses después solo ha aprobado 3.366…un 0,7 %.
Se estiman un mínimo de cerca de 2 millones de despidos para el otoño.
300.000 autónomos tendrán que cerrar sus negocios.
Los españoles asisten perplejos a la desaparición de la escena política de Cayetana Álvarez de Toledo, Rosa Díez y/o Juan Carlos Giraurta.
El vicepresidente Iglesias tiene a toda la plana mayor de su partido Unidas Podemos investigado.
España figura DE NUEVO como líder entre los contagios en Europa.
El “comité de expertos” encargado de dirigir la estrategia en la Comunidades Autónomas ante el covid19… no existía.
José Manuel Franco, centrado en la estrategia de acoso y derribo a Isabel Díaz-Ayuso, consiente una manifestación en apoyo de la “no utilización de la mascarilla” de 3.000 personas en el centro de la capital de la que se estima habrá unos 50 fallecidos.
Puigdemont gasta unos 800.000 €/mes en su “papel” de prófugo de la justicia español.
Y cuando uno piensa que no puede haber un tonto más aparece el iluminado alcalde de Vigo, Abel Caballero, anunciando un gasto de 800.000 € en luces navideñas… en plena crisis del coronavirus.
Poco nos pasa…
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