El 7 de marzo del 2.008, Isaías Carrasco, salía de su casa para ir a trabajar. En el portal fue abordado por un pistolero perteneciente al socio preferente del actual gobierno de España: ETA. Su mujer y su hija mayor, 20 años, escucharon los disparos y corrieron escaleras abajo en el convencimiento de que la víctima era el marido y padre. Y así fue. 2 horas más tarde moría Isaias Carrasco. Dejaba tres huérfanos, dos chicas de 20 y 14 años, y un hijo de 4.
La historia política de Isaías es la de tantos y tantos militantes de grupos políticos que, ocupando el cargo de concejal durante un tiempo, tienen la doble desgracia en algunas elecciones de: primero no salir elegido y, segundo, no estar en la cuerda influyente de algún “jefecillo o jefazo” de la organización que los recoloca el algún sitio (ejemplos de estos especímenes hay muchos y notorios; en la actualidad es un caso interesante el de Adriana Lastra que merced a una hábil colocación cerca del César Sánchez ha accedido a un puesto importante en el P.S.O.E.; se la espera en Ribadesella para examinarse de 2º de bachillerato). Pero el bueno de Isaias no salió elegido y se incorporó como cobrador en el peaje de la AP-1 a su paso por Vergara.
El mañoso político Patxi López era entonces el candidato a Lendakari por el PSE (Partido Socialista de Euskadi) y de inmediato mostró su indignación y cólera por el asesinato de Isaias con aquellas palabras… “el único destino de ETA es desaparecer”.
El entierro del exconcejal del PSOE fue muy emotivo. Por allí andaba el elegante y bizarro Patxi López muy compungido y pesaroso que, con rapidez se ofreció para llevar el féretro del asesinado; no obstante había elecciones dos semanas más tarde y era muy recomendable dejarse ver.
Descanse en Paz Isaías Carrasco.
A Patxi López le ha ido en los años posteriores muy bien; en la actualidad es Secretario de Política Federal del PSOE y Presidente de la Comisión Constitucional del Congreso y, por supuesto COLEGA DEL CÉSAR SÁNCHEZ. Para este ascenso meteórico el Sr. López sólo tuvo que demostrar una condición/cualidad muy cotizada y valorada en el actual PSOE: que el día que portaba el féretro del exconcejal su indignación y cólera era una BURDA MENTIRA.
Con ese aval de persona de plástico que presenta Patxi López, le auguramos una larga vida llena de entrevistas en LA SEXTA, EL PAÍS o en la CADENA SER, un bolsillo lleno de euritos que pagamos religiosamente los contribuyentes (entre ellos la viuda de Isaias Carrasco) y una jubilación apacible.
Hay míseros, infames y/o ruines. Y después está Patxi López.
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