viernes, 10 de julio de 2020

Agitadores inquietantes y perturbadores


Juan Carlos I

La situación por la que está pasando el Rey emérito Juan Carlos I está de rabiosa actualidad; porque de rabiosa puede catalogarse la airada reacción por parte de nuestra clase política con el consiguiente apoyo servil de cierta prensa mediática.
Y puede entenderse que el hecho de pillar beneficios de gestiones produciendo ingresos extras de manera ilícita produzca una reacción de rechazo a la persona que las lleva a efecto. Es más: no solo “debe de entenderse”, es obligado indignarse como ciudadano.
Parece razonable proveer a la persona afectada de la presunción de inocencia (la misma que la ministra de igualdad concedió a las personas que sometieron a deplorables abusos sexuales a menores en Palma de Mallorca). Aún así, y dando por hecho que Juan Carlos I cometió ilegalidades, resulta escandaloso, frívolo y miserable la diferente reacción según quién sea el causante y/o la víctima.

En esta España dormida y anestesiada existe un tercer agente decisivo en la valoración de cualquier hecho que afecte a las personas: EL AGITADOR.

Y nuestro país anda en manos de agitadores profesionales que distorsionan, manipulan y mangonean hechos y opiniones dirigiendo el veredicto donde más se ajusta a sus intereses.
Son agitadores inquietantes y perturbadores que encuentran hospitalidad en sus votantes que lejos de pedir aclaraciones se limitan a obedecer.
Porque solo se puede entender como un ciudadano sumiso y obediente aquel que acepta como bueno y aplauda el desarrollo del caso Corinna/Juan Carlos I nacido de las informaciones del comisario Villarejo y se escandalice y de por ignominiosas las fuentes que comunicaron que la actual Fiscal General del Estado riera y aprobara (Y NO DENUNCIARA) la creación de una red de prostitutas con el fin de extorsionar a empresarios y políticos incluso incorporando grabaciones que lo acreditaban: el mismo comisario Villarejo.

Inquietante y perturbador es la adjudicación de comisiones ilegales; pero cuanto menos debería de ser igualmente inquietante y perturbador los 20.000 millones de euros robados a los parados en la Junta de Andalucía con el añadido de que este último se produce en el partido, PSOE, del inquieto y perturbado.

O los desmanes económicos realizados por los diferentes partidos independentistas o, para no irnos tan lejos, las inquietantes y perturbadoras declaraciones LA SEMANA PASADA del señor Marjaliza en los juzgados de Madrid confirmando la entrega de 1.000.000 de euros al diputado Simancas… el mismo que feliz de la vida, ocupa un lugar en el Congreso de los Diputados situado  inmediatamente detrás del inquietado y perturbado Sánchez. 

Y si cara de asombro y consternación produce el destino que, al parecer, tenía el dinero de esas comisiones (a una señora despechada y vengativa), el mismo pasmo y pavor deben de producir los constantes donativos en forma de mansiones, ministerios, altos cargos y direcciones generales que tiene a bien conceder el vicepresidente a sus buenas amigas.

Y una vez comprobada la fidelidad y el servilismo de sus electores, Pedro/Pablo se muestran puritanos en unos juicios y enojados en los mismos según quién, cómo y dónde. Abusan sin rubor de sus trampas e hipocresías. Porque hay que ser muy falso e hipócrita para actuar como el señor Pedro Sánchez que utiliza para veranear la mansión de La Maleta en Lanzarote, que fue un regalo del rey de Jordania, Hussein, a la persona de Juan Carlos y que éste tuvo a bien cedérsela a Patrimonio.  

Y tener a unos tramposos dando lecciones de recato, honestidad y decoro produce inquietud y perturbación. Al menos en mi persona.

PD: el 23 de febrero del año 1981 se produjo en España un golpe de Estado. Durante 8 largas horas los tanques pasearon por diferentes ciudades a la espera de la comparecencia del por aquel entonces era Jefe del Estado, Juan Carlos I. Finalmente éste se presentó ante todos los españoles dando por finalizado el golpe y devolviendo el poder al Congreso de los Diputados. Eso también es memoria histórica.


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