Estimada Sra. Ursula Von der Leyen, Presidenta de la Comisión Europea,
la prensa escrita de hoy, viernes 25 de septiembre, recoge su preocupación y consiguiente enojo, por las conclusiones que Josep Borrell ha transmitido tras las negociaciones que éste, en nombre de la Unión Europea, ha llevado a cabo con el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela para “conseguir celebrar unas elecciones democráticas con unos MÍNIMOS de transparencia”.
Si ya el hecho de tener que supervisar unas elecciones da una idea muy aproximada del estado en que se encuentra Venezuela, la realidad de que el individuo que representa a Europa vuelva de su gestión blanqueando el régimen dictatorial y totalitario entiendo le supondrá perdidas de sueño.
Desde la lejana Bruselas, y más aún desde su domicilio en las afueras de Hanover, seguro que tiene Vd conocimiento de las andanzas de nuestro presidente Pedro Sánchez; por lo que sorprende que a estas alturas, un individuo nombrado por el caótico español, como se le conoce en Europa, le provoque preocupación.
Su negociador con Maduro pertenece a un país que el 20 de enero del 2.020 permitió la entrada en España a Delcy Rodríguez, persona vetada en Europa por violación de los Derechos Humanos. Con la Sra. Rodríguez no solo se hizo la vista gorda, sino que el ministro Ábalos fue personalmente a recibirla; y no solo la acogió en el aeropuerto, sino que la ayudó a trasladar 40 maletas cargadas de documentos y dinero que venían acompañando en el Falcon privado de la tal Delcy. Nada extraño si se tiene en cuenta que el anterior embajador español en Venezuela, Raúl Morodo, está siendo investigado por el Juzgado Central Número 1 de Madrid presidido por el juez Santiago Pedraza, por el saqueo de 5,4 millones. Si Vd, Sra. Von der Leyden, manda al frente de esta misión diplomática al Sr. Borrell, representante de esta España de Sánchez, no debe de provocarle ninguna sorpresa el resultado de “la gestión”.
Igualmente es seguro que conoce como el director de la empresa Turnin y PlagScan, el alemán Markus Goldbach, salió al paso de una información falsa que desde Moncloa aseguraba que la prestigiosa empresa avalaba que la tesis doctoral del presidente Sánchez era perfectamente legal. El propio director emitió un comunicado al día siguiente aclarando que “la tesis doctoral del Sr. Sánchez superaba ampliamente los software de coincidencias”.
No voy a aburrirle más. Enumerarle las mentiras, trampas y desmanes del presidente Sánchez ocuparían tal cantidad de folios que la llevarían un buen número de horas leerlas.
Además entiendo que, con muy buen criterio, la primera reflexión que provocarán en Vd. estos ejemplos será: “es un asunto privado de un país europeo; es problema de los españoles. Si Vds. lo consienten…”.
La preocupación, muy lógica por cierto, que lleva a la Unión Europea a enviar a Venezuela una comisión para supervisar las elecciones democráticas y a hacer un seguimiento pormenorizado de la situación del país sudamericano cuyos gobierno al completo está perseguido por el FBI por narcoterrorismo y tráfico de cocaína, se queda corta en comparación con el último informe del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas acusando al régimen de Venezuela de crímenes de lesa humanidad con ejecuciones, desapariciones y torturas. La defensa de este régimen la lleva un abogado español, Baltasar Garzón, buen e íntimo amigo de la actual Fiscal General del Estado, María Dolores Delgado.
La razón de enviarle este escrito responde a una responsabilidad que entiendo sí tiene algo que ver con el cometido de la Unión Europea al tener conocimiento de la deriva de un país miembro del mismo como es España. Desconozco si entra dentro de las competencias “técnicas” de la Unión Europea la gestión de prevenir situaciones como la que vive Venezuela. Sin embargo sí tengo la seguridad de que su autoridad moral y su talento no solo le obligan a mirar con preocupación lo que acontece en España, sino que le exigen comprometerse con una actitud firme y decidida para inmovilizar este camino. Eso es ser un buen político y una persona de bien: anticiparse al desastre que se avecina en un país miembro gracias a lo que su capacidad y preparación dicta.
Para terminar un ejemplo: ayer mismo, frente a la sede de la Comunidad Autónoma de Madrid, unos 50 manifestantes radicales (por supuesto sin las obligadas mascarillas y saltándose todas las normas de seguridad) increparon a la policía provocando 4 heridos entre las fuerzas de seguridad. Por si cae Vd en el argumento de que estos hechos son “uno más” de los muchos actos que provocan los radicales en Europa, le aclaro que al grito de “vamos a por ti” (refiriéndose a la Presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz-Ayuso), iba al frente de los extremistas una srta de nombre Isabel Serra condenada a 19 meses de prisión por dirigirse en otra ocasión anterior a una policía en estos términos:”eres una cocainómana, mala madre, hija de puta, perra, que te follas a todos los policías municipales; si fuera tu hija tendría que cogerte un arma y pegarte un tiro”. Y por si cae Vd en el argumento de que este tipo de personajes dañinos los tienen en todos los países, le aclaro que Isa Serra recibió la felicitación del ACTUAL vicepresidente del gobierno, Pablo Iglesias, y le premió nombrándola vocal de su partido.
Por estos hechos he osado dirigirme a Vd; por si cae en el cómodo argumento de pensar que los hechos que están aconteciendo en España no van con Vd ni con la Comunidad Europea.
Es responsabilidad de Vd. como Presidenta anticiparse con todos los medios que la Unión Europea dispone para no tener que mandarnos dentro de un par de años a cualquier empleado de la U.E. a enumerar cuantas ejecuciones, desapariciones y “maletas ocultas” se producen en España.
España es Europa.
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