martes, 15 de septiembre de 2020

el nuevo portacoz

 

1.986 fue un año especialmente operante para la banda terrorista ETA. 39 asesinatos entre los que hubo camareros, civiles, peones de la construcción, jubilados y como no Guardias Civiles. De estos crímenes 21 se produjeron en Madrid.

Por aquel tiempo, un muchacho de 18 años, ingresa en las Juventudes Socialistas, afiliándose en el distrito madrileño de La Latina.

Rápidamente el chico va haciéndose un hueco en la política de la Comunidad de Madrid evidenciando una habilidad en trueques y cambalaches en toda su trayectoria muy aconsejables en la “nueva política”. Las invariables victorias del Partido Popular provocan cambios en las personas de las que nuestro protagonista sale siempre “vivo”.

Se labra un hueco dentro de las filas del PSOE en el campo de las campañas. Profesor de la Universidad Carlos III de Madrid, se le considera un experto en comunicación corporativa y política lo que le lleva a dirigir, diseñar, planificar y desarrollar numerosas campañas electorales desde el año 2.000.

Entre los años 2.000 y 2.003 entra a formar parte de la Comisión Ejecutiva Regional del PSOE como secretario de comunicación al tiempo que es elegido diputado en la Asamblea de Madrid.

Situémonos en este convulso 2.020. Nuestro personaje es convocado por el presidente Sánchez a la sede del PSOE en Ferraz. Allí tiene lugar una reunión a la que acuden José Manuel Franco (delegado del gobierno de la Comunidad de Madrid), Ángel Gabilondo (diputado y portavoz del grupo parlamentario PSOE en la Comunidad de Madrid), el presidente Sánchez y nuestro personaje. Conviene recordar, como anécdota y muestra de la depravación de Sánchez, que por aquellas fechas fue incapaz de visitar ningún hospital donde morían diariamente 1.000 personas.

En la reunión de Ferraz, el presidente Sánchez recrimina a Gabilondo su actitud en exceso educada, pacífica y dócil con la actual Presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz-Ayuso e inflama a Franco a maniobrar contra ella. Antes de marcharse, Sánchez aparta como portavoz a Gabilondo y nombra a nuestro protagonista.

Para Sánchez, este profesor de la Universidad Carlos III, presenta un CV idóneo para este trabajo. Y es que a sus ya reconocidos bandazos políticos, el elegido presenta una garantía muy valorada en este gobierno feminista PSOE/UP: ha evidenciado la manera de tratar a las mujeres sobre la base del suceso que pasamos a narrar:

ocupando ya su escaño como diputado en la Comunidad de Madrid, Noelia Martínez (concejal socialista electa en el Ayuntamiento de Madrid), denunció al actual “azote de Díaz-Ayuso” por haberle colocado un dispositivo en su móvil que le permitía espiarla. La denuncia llega a Rafael Simancas, director de la gestora del PSM, y a Amelia Valcárcel, filósofa feminista que presidía la Comisión de Garantía de Igualdad. Son tiempos de grandes avances y éxitos del feminismo en el PSOE: en Ponferrada arrebataban al P.P. el Ayuntamiento gracias al cambio de voto de un concejal ¡¡condenado en firme por abuso sexual a la concejala Nevenka Fernández!!

Simancas y Valcárcel toman nota. El chico parece hábil con las mujeres: un buen feminista. Noelia Martínez, sorprendida por la escasa repercusión que tiene su denuncia, insiste y consigue un informe elaborado por la Dirección de Gestión de Riesgo y Fraude de Telefónica en donde se recoge que su celoso exnovio no se ha conformado con espiarla a ella, sino que ha pinchado el dispositivo móvil a otras dos mujeres más: una diputada del P.P. y otra persona vinculada a la Asamblea de Madrid.

Aquel muchacho tiene un nombre: José Carmelo Cepeda. 

Ayer debutó como portavoz en la Asamblea de Madrid con motivo de la 1ª sesión del Debate sobre el Estado de la Región.

Desconozco si Cepeda ha pasado en estos últimos días por el chalé de Galapagar donde el vicepresidente, experto en el manejo de ocultación de móviles de novias y con un amplio historial de machismo, le haya podido dar los últimos consejos en la estrategia de acoso y derribo a la Presidenta.

Lo que sí es ya patente en este gobierno PSOE/UP es el reconocimiento al que sigue con provecho y eficiencia el manual del buen machista.



No hay comentarios:

Publicar un comentario