Apelar a número de muertos e incluirlo en los debates políticos es algo que me causa rechazo; en el caso del covid19, y principalmente por respeto a los fallecidos, esta oposición aumenta considerablemente. Azuzar controversias alrededor de una desgracia tan pavorosa suele ir revestido de un estilo que, en principio, nos desagrada. Así que vaya por delante nuestra disculpa a los afectados por cercanía familiar o apego porque en nuestro escrito de hoy tengamos que acudir a cifras frías y deshumanizadas. En este terreno del relato, la izquierda va muy por delante de cualquier posición moderada, y consigue colar con el mantra de “ideología progresista” al comunismo que cuenta con unos 100 millones de muertos en su haber.
Vaya en nuestro descargo a la posible culpabilidad, que citaremos estadísticas de fallecidos como respuesta al presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Emiliano García-Page.
Emiliano García-Page, suponemos que a toque de corneta de su amo Pedro Augustus Sánchez en su asalto a la Comunidad de Madrid y a su Presidenta Isabel Díaz-Ayuso, se ha descolgado esta semana con unas declaraciones muy coherentes con el carácter conciliador que destilan la pareja Sánchez/Iglesias: “en el 80% de los casos que nos han llegado, vinieron todos de la bomba radiactiva vírica que se plantó en Madrid”. Y si ya sorprende la seguridad con la que Emiliano da la cifra del 80%, asombra su firmeza con la que apuntala su argumento con un “todos”. Es de suponer que tras estas explicaciones, el sumiso Emiliano ha recibido la aprobación indulgente del presidente Sánchez.
Emiliano García-Page apuntaba desde chavalillo en este curioso mundo de los méritos en la carrera política. A los 17 años se afilió al Partido Socialista y con 21 años fue concejal en el Ayuntamiento de Toledo. Al tiempo estudió la carrera derecho y, como tantos y tantos políticos, una vez obtenido el título de abogado, nunca ejerció como tal. Su fulgurante recorrido político tuvo un antes y un después cuando el 24 de abril de 2015 se descolgó con un “no seré Presidente de Castilla-La Mancha con coalición alguna”… y fue presidente poco después con el apoyo de los comunistas. Y es que la nueva política depara estas sorpresas que ya no solo están asumidas como “conductas correctas”, sino incluso en la actualidad promocionadas por el mentiroso Pedro Augustus que premia con reconocimiento tales comportamientos.
Y el radiactivo Emiliano García-Page debería de echar un ojo a la estadística de la Office of National Stadistics que en plena pandemia situó a las provincias de Ciudad Real, Guadalajara y Albacete (las tres pertenecientes a Castilla-La Mancha), junto a las provincias de Brescia y Piacenza en Italia, como los lugares con más exceso de mortalidad por la pandemia ¡¡de Europa!!.
Pero en el colmo de la desfachatez y el descaro, la Comunidad de Castilla-La Mancha lanzó el 20 de agosto del 2.020 una campaña promocionando el turismo con videos y fotografías colocadas en diferentes calles céntricas y estaciones de metros de Madrid con un slogan que bien lo podría haber firmado el comité de expertos del doctor Simón:
“tus vacaciones nunca han estado tan cerca”
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