sábado, 10 de octubre de 2020

la triada oscura

 

Rosa Díez es uno de esos casos excepcionales que solo encontramos en la política española. Siendo militante del PSOE, fue diputada foral de Vizcaya (1.979-1.983) y miembro de la ejecutiva del PSE (1.985-2.000). Exponer sus cargos, responsabilidades como política nos llevaría ocupar todo el texto de hoy. Así que nos centraremos en esta breve presentación en su competencia como Presidenta de la Delegación Socialista Española en el Parlamento Europeo (1.999-2.004) y eurodiputada (1.999.2.007), y en ser cofundadora de UPD y portavoz en el Congreso de los Diputados de UPD (Unión Progreso y Democracia) una vez que se percató de la catadura moral de José Luis Rodríguez Zapatero.

Y hemos calificado como “caso excepcional” de nuestra política la figura de Rosa Díez, por considerar caso único que personas dedicadas a la política que muestren nivel intelectual desparezcan del primer plano. No es casualidad que uno de nuestros más insignes escritores, Arturo Pérez-Reverte, nos regalara una reflexión demoledora: “los políticos actuales carecen de solvencia intelectual”. Así asistimos al extraño y triste alejamiento de Cayetana Álvarez de Toledo, a la desaparición del primer plano de la política de Juan Carlos Girauta, éste de manera voluntaria, o la estratégica colocación en la rampa de salida de Ángel Gabilondo.

Afortunadamente, medios como el ABC, EL MUNDO, la COPE, ONDA CERO o ESRADIO entre otros, recogen, para disfrute de muchos, lo que la política desecha.

Por lo tanto, cuando alguno de estos personajes HABLA, conviene estar atento.

Recogemos en nuestra entrada de hoy parte de la entrevista concedida por Rosa Díez en ESRADIO el viernes 9 de octubre. Merece la pena escucharla.

El pensamiento y las reflexiones documentadas de Rosa Díez tienen el aval de una persona que habla desde la total ausencia de rencor y desde la templanza de una persona sobria y de alta intelectualidad.

En un primer momento provoca preocupación e inquietud escuchar la firmeza de su argumentación. Posteriormente produce miedo al comprobar la absoluta verdad de su mensaje.

“Debo cumplir con mi misión histórica y la cumpliré porque la Divina Providencia me ha elegido para ello”. Adolf Hitler





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